Blancos

En un combate en la cual puede haber más de un contrincante, es importante ser efectivo y preciso con los golpes para dejar fuera de combate a los oponentes rápidamente.

Se define la Linea Central, en la cual se ubican la mayoría de los puntos vulnerables para dejar un peleador fuera de combate:

Naríz: causa hemorragia y lagrimas en los ojos que dificulta la visión.
Mentón: puede quedar inconciente.
Garganta: desde asfixicia o tos momentanea hasta fractura traqueal (depende de la potencia del golpe).
Boca del estomago: desde dolor agudo, asfixicia momentanea, hasta perder la conciencia.
Genitales: Intenso dolor, imposibilita cualquier esfuerzo.

Tambien se pueden golpear las costillas para causar daño y provocar que el oponente descuide los blancos principales.

Los tres blancos básicos más importantes y dañinos son: ojos, genitales y rodillas.

Ojos: con golpe de dedos, puede provocar desde derrame interno hasta la perdida del ojo.
Rodillas: desde luxación hasta fractura.

La rodilla es el blanco de ataque más efectivo, ya que se encuentra más cerca y descubierto que cualquier otro blanco.