Golpe de "Una Pulgada"

Mucho se ha hablado sobre Bruce Lee, en cuanto a su historia, su filosofía, su estilo de lucha, sin embargo, poco se conoce sobre uno de sus golpes más afamados en el ámbito marcial, desarrollado por este maestro debido a la extraordinaria fuerza que puede producir el cuerpo, con la coordinación muscular adecuada y ejecutada a una pulgada de distancia del oponente.

Primero debes desarrollar la percepción kinestética o la facultad para sentir la contracción o relajación de tus músculos. Bajo este principio debes saber que los brazos y piernas son como grandes visagras que se abren y cierran, para extender un brazo contraes los músculos antagónicos (tríceps) y para retraerlo utilizas los músculos agónicos (bíceps), ocurre los mismo con los músculos de las piernas. Debes manejar este principio para dar golpes veloces. Muchos luchadores dan golpes fuertes pero no son rápidos debido a que al golpear tensan ambos músculos (agónicos y antagónicos), de esta forma los músculos agónicos actúan como un freno y ponen resistencia a la extensión de una extremidad.

En posición de guardia izquierdo, con el cuerpo totalmente relajado, solo vas a contraer los músculos necesarios para realizar el golpe.

Todo lo que se detalla a continuación debe ocurrir desde que se extiende el brazo hasta que llega a su destino.

1. Se lanza el golpe relajado y veloz, con la mente fijando el blanco unos 6 centímetros más adentro.


2. La fuerza se inicia en el pie izquierdo con un empujón del talón o pivote como un resorte. Paralelamente, con el pie derecho se da un pequeño paso hacia adelante de un 10 cm aprox. y el pie no aterriza hasta que el golpe llegue a su destino, de lo contrario la fuerza que se genera con un pie, se minimiza con el otro hacia el suelo.


3. Del talón la fuerza llega a la rodilla, la pierna se extiende para que ésta suba a la cadera.


4. La cadera gira fuertemente en dirección opuesta a las manecillas del reloj.


5. La fuerza sube por el tronco que va girando en el mismo sentido y aumentando la fuerza como un torbellino llegando a los hombros.


6. Los hombros se alinean en dirección al blanco trasladando la fuerza al brazo.


7. El brazo termina de extenderse trasladando la fuerza al puño. Sin embargo, el brazo no se extiende totalmente, solo un 90%, de lo contrario, te expones a lesiones.


8. En el ultimo momento el puño se contrae realizando un quiebre de muñeca hacia arriba ofreciendo los 3 primeros nudillos para golpear.


9. El pie derecho aterriza.


10. El cuerpo se relaja.